El rey del lugar es el alerce o lahuán (lawal, en lengua mapuche) uno de los árboles más longevos de la tierra. Esta conífera milenaria puede alcanzar los 60 metros de altura.
Este espacio protegido ocupa una de las zonas más genuinas y representativas de la biodiversidad de los Andes. No cuenta con grandes elevaciones y los vientos húmedos del oeste traspasan con mayor facilidad las montañas, dejando notables precipitaciones a lo largo del año que alimentan una frondosa vegetación. Arroyos, ríos, lagunas y lagos tejen un formidable entramado acuático donde el esquivo huemul, un cérvido en peligro de extinción y símbolo nacional, encuentra un entorno favorable. Pero, sin duda, el rey del lugar es el alerce o lahuán (lawal, en lengua mapuche) uno de los árboles más longevos de la tierra. Este árbol nativo de la selva húmeda valdiviana se localiza entre los paralelos 40º y los 43º de latitud Sur, tanto en Argentina como en Chile, llegando a la misma costa del Pacífico. Es un árbol milenario, de crecimiento muy lento, apenas 1 cm cada dos décadas y enorme. Puede alcanzar los 60 metros de altura y su tronco, los casi 4 metros de diámetro. De hecho, en el parque nacional chileno Alerce Costero, se ha catalogado un ejemplar conocido como el Gran Abuelo que ronda los 3.700 años de edad.
La gran calidad de su madera, de color rojizo, resistente a la pudrición y los insectos, liviana y fácil de trabajar llevó a una sobre explotación masiva de los alerzales.
Para evitar su extinción los gobiernos chileno y argentino decretaron hace unas décadas la prohibición de talar ejemplares vivos y declararon zonas de especial protección como el Parque Nacional de Los Alerces. Este es un espacio de casi 3.000 ha. situado al norte de Esquel que no goza de gran renombre internacional, como otros parques adyacentes, pero que es muy estimado por los visitantes locales y que, con toda probabilidad, seducirá a cualquier forastero.
Nosotros habíamos previsto una estancia de tres o cuatro días -finales de otoño- y nos demoramos un par de semanas persiguiendo sus bellezas, aguantando con alegría las primeras heladas invernales (max. de -15 ºC) El PN. Los Alerces es perfecto para el naturalista amateur; los senderistas y los amantes del BTT y la vela, así como los pescadores.
Las rutas RP 15 y 17, luego 44, en trayectos -ripio- de gran atractivo paisajístico cruzan el parque entre Cholila y Trevelin.
Además de maravillas insospechadas, el PN. Los Alerces es tierra de secretos bien guardados. Por esta zona, a la altura de Cholila, encontraron refugio Butch Cassidy y Sundance Kid. Esa localidad es sede de una fiesta nacional del asado, que se celebra el primer fin de semana de febrero. Esquel aparece como la mayor población de la región; agradable y bien provista de servicios. Chema Huete
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